Nace en la sierra de Durango México. Está nutrido por una tradición que data de más de 800 años de antigüedad.
El primer paso es seleccionar las mejores piñas que crecen silvestres en la sierra. Después, se colocan en un «cocedor» a base de piedras volcánicas y leña.
Se cubre con tierra para que se puedan cocer de forma correcta. Posteriormente, pasan a un proceso que llamado molienda, cuyo secreto es procesar los pedazos a un tamaño ideal para poder extraer todos los azúcares.
Finalmente pasa a los tanques de madera para su fermentación y su embotellado.
MARCA
Una imagen fresca con una gran historia detrás y una excelente calidad de producto en sus distintas variedades.
La leyenda del capo, un ser que transformo un espíritu en común.